En estos días lluviosos, la dinámica del cole cambia un poco. El principal cambio es que los niños no pueden salir al patio y andan un poco descolocados (y los profes a juego).
El caso es que ayer por la tarde llovía en condiciones y mientras recogíamos, los niños empezaron a hablar:
- Está lloviendo
- ¿A ver? Hala, sí, ¡cómo llueve!
- Pues yo tengo capucha.
- Pues mi mamá trae paraguas para que no me moje.
- Ya, mi mamá siempre trae paraguas.
- Y la mía.
- Y mi papá.
Y me quedé pensando en lo absolutas que son las cosas cuando somos pequeños y el gusto que da eso.